solo

Sé que dónde estoy ahora sólo puedo llegar sólo, no trates de entenderme, no te esfuerces en entenderme. Dónde estamos sólos en las profundidades del alma, es donde nos intentamos entender a nosotros mismos.

Te intento describir algún momento de estos:

Cuando yo me fui dentro, llegué muy lejos, de noche y hacia frío, era un lugar que yo recordaba una vez que me perdí en el bosque, me recosté en él y pensé que era un viajero del tiempo, de pronto aquel bosque en el que me había perdido ya no era aún bosque, sino el paso cercano por dónde pasaban ciertos seres a unas horas del día.

Pero yo había vuelto de noche a aquel lugar, y en esta antigua ocasión no me atreví a explorar porque había un pájaro enorme atrás mío moviéndose y no quería interrumpir lo, probablemente si yo me movía el se iría volando al captar mi presencia humana.

Pero estaba vez estaba sólo, pero reconocía un camino, la luna brillaba pero no es importante, sólo que su luz me iluminaba porque nada quisiera saber más allá de estos astros que los humanos creen saber todo sobre ellos. Tomé el camino que me llevaban a unas aguas en dónde podría bañarme, el agua estaba fría y hacía frío en el ambiente. En ciertas ocasiones el frio sirve para despertarnos y poner los pies firmes nuevamente en la tierra y darnos cuenta de nuestra fortalezca interior.

Me dolía el cuerpo, pero me bañé en sus aguas hasta que el dolor poco a poco fue desapareciendo. El agua me decía que debía olvidarme, que en el preciso momento en que me despojara de todo algo iba a abrirse en mi, que no debía pensar en los demás ni en el significado de las cosas. Estaba preparado para escuchar al agua que estaba tan fría y dolía. Yo entendía esas palabras y sabía sobre su significado pero debía ignorarlo y confiar en mi. Ya no como un ser incompleto e incómodo constantemente, sino como un ser adolorido y sabio.

¿Es real que en el fondo de este bosque en donde me encuentro por primera vez rotundamente sólo es donde debo aprender la siguiente venida?

Cada vez, en mi forma humana, he estado confiando más en mi, en mi intuición y en la fuerza de mi poder mental. Debo, seguro entrenando me, lo suficiente para seguir escribiendo y hablando con otras potestades.

No puedo medirme con la misma regla con la que mido a los demás, debo tener más paciencia, y cuidado, dedicación.

Quizás comience una temporada larga en la que escriba bastante, mientras más escribo una línea más fina me separa de la mayoría y yo quiero estar lejos por voluntad propia. No quiero seguir sus costumbres, sus reglas sin sentido. Debo mantenerme alerta y amable.

Vuelvo a estar sólo en el bosque y el sol parece nunca salir, he pasado tanto tiempo en el agua fría que ya no siento mis dedos, mis extremidades. Hay un montón de insectos rondando el espacio, yo sólo soy una parte liviana de todo el gran bosque. Hace tiempo, en este mismo bosque corrimos desnudos y adoramos a los árboles viejos que nos cobijaban, nos sentimos como un lobo salvaje. 

Yo siempre estaba dispuesto a desnudarme para nadar en sus aguas, y que sus aguas me hablaran, siempre honestas y claras. Yo había ganado camino en la arrogancia y el orgullo. Pero siempre me había costado asumirlo, en la forma en la que hablaba era claramente visible. Pero en mis acciones no. 

Yo ya me encontraba lo suficientemente lejos, se notaba en mi mirada y en mis gestos. No quería ser amable y condescendiente para que los demás pensaran que tenían algo similar conmigo cuando enrealidad no compartíamos nada, absolutamente nada en común más que lo más básico de la naturaleza humana y miserable de la que yo realmente no me identificaba de forma alguna y había luchado mucho para alejarme de esa imagen salvaje y rudimentaria.

No quería recibir el reflejo de los humanos, por amor, dedicación y disciplina. Buscar un lugar aislado dentro de la multitud en donde pudiera cuidar mi silencio y mi mirada.

No me gusta los humanos indispensables, necesarios siempre y dependientes. Que tejen una red extraña de codependencia emocional a base de relaciones de poder y abuso, para que hablar del aspecto sexual, que es indispensable a la hora de relacionarse y crear una falsedad de confianza para aprovecharse unos entre otros, escalar socialmente, y rescatar lo más posible de sus privilegios.

Creo que los humanos corresponden a una raza muy primitiva y básica del desarrollo de todo lo que existe en todas las dimensiones posibles. Y el primer paso es desidentificarse de lo que uno creo que es para volver a reaprender lo que uno si es o quiere ser. Tener la voluntad del cambio y de elegir conscientemente mientras nos hacemos responsable también por ello.

Pero es demasiado tarde en el plano concreto, dónde el mundo lleva demasiado tiempo funcionando con las reglas idiotas de unos cuantos humanos rebalsados de poder y vacío.

En este lugar tampoco soy yo, en el lugar en donde escribo y puedo ser todos y cada uno. En este lugar donde la intimidad es difusa y todo es posible, cuando tu mente es original. 

Me gusta como pasa el tiempo mientras escribo y una cosa me lleva a otra y de forma espontánea, sin premeditar gran cosa, algo me hace pensar que aquellas aguas heladas me han llevado hasta la profundidad de algo más grande. Es difícil volver después de esto, pero es bueno sentir que volvemos desde un lugar muy lejos donde ya nada se nos es conocido. Desde ahí podemos vivir otro tipo de amabilidad o recibir otro tipo de hospitalidad, cómo si intentaremos alojar en nuestra casa a seres de otro planeta que lucen geniales, de color azul claro, traslúcidos, esbeltos y brillantes y queremos que se sientan cómodos. Ellos nos hablan de cualquier cosa que a nosotros nos parece asombroso e iluminador. Nos hace recordar la esperanza de un mundo distinto al que hemos estado viviendo y que nos resulta doloroso y insoportable y por eso nos hacemos tanto daño sin hacernos responsables de nada. Estos seres, están sanos y son serios, saben de lo que hablamos porque todo lo conocen ya, y todo lo comprenden.

Los humanos no pueden evitar intentar constantemente buscar un nuevo útero dónde cobijarse como antes de nacer y el proceso de beber la leche de la madre sin tener ningúna preocupación más que comer y defecar. Así que ante estos hermosos seres, ellos simplemente pueden sentirse tranquilos ya que son como unos grandes padres acogedores. Pero enrealidad la tierra es un lugar abandonado hace ya muchísimos tiempo, los seres más conscientes que habitan otros planetas o dimensiones no se atreven a visitarlo, los seres amables que aún quedan dan lastima y los demás probablemente actuarían de una forma violenta con ellos. 

Es muy probable que nada de esto cambie jamás, que la habilidad de escribir fantasía sea más bien una habilidad concreta para traducir símbolos y creencias de otros tiempos, y revelar algunas cosas que quedan impresas en los encargados de traducirlas.

Pero está prohibido como muchas otras cosas por las reglas con las que convivimos y ayuda a mantener a todos ordenados como un gran rebaño. Y no esque esto sea un problema, el orden es tranquilo y amable y permite una relación armoniosa entre todes, el problema son otros asuntos que no queremos tocar en esta carta.

Sabe usted de lo que hablo, sabe usted que no podemos entrometernos en los temas de los humanos porque son sus propias responsabilidades, y los bebés deben aprender a caminar e ir al baño en algún momento.

Por otro lado, es precioso estar tranquilos y mantener la paciencia. Aprovechar al máximo el tiempo para planear el próximo paso en nuestro proceso creativo, expandir la mente y mantener la calma. Ejercitar el cuerpo y alimentarnos de la mejor manera. Ser amables siempre ante toda circunstancia.