Después de leer tú carta, me siento más contento. Es verdad lo que dice murakami, pero a la vez yo siento que el tiene un gran talento para escribir, y tener paciencia para ello y llevar una vida tremenda.
Yo por mi parte, también siento el agotamiento de dedicar gran parte del día en fantasear sobre el proceso creativo del guión. Pero lo he disfrutado mucho y como nunca. Están naciendo, dentro de mí, una historia inacabable. Y nos recuerdo, a cada momento. En la tarde le tomaré fotos a mi cuaderno para subirlo al blog. También he hecho unos dibujos a la ligera. Gracias por enviarme información sobre el tema de la paleta de colores, la voy a estudiar y claro que me interesa ese tema, siento que esos niveles de abstracción como de pensar un mundo en colores es lo que me agrada. En unos de mis últimos escritos, si recuerdas, hablé sobre el mundo púrpura dónde habitamos. Creo que hay que recolectar harto de nuestros escritos para este guión e intentar revivir esos momentos.
Debo revelarte que me las estoy ingeniando en esta historia para que realmente no haya mucho diálogo. Quisiera crear algo en dónde se le da un espacio trascendental al mundo de las palabras, y en dónde se diferencia la conversación cotidiana como pagar la micro y decir buenos días y la conversación del mundo interior que es difícil de transmitir.
Nuestros personajes hablarán sobre estos temas. Pero también serán livianos como plumas de aves. Creo que en el cuaderno llevaré una historia más como lo que diríamos un guión. Pero también subiré textos analizando dimensiones que quiera presentar en esta grabación y necesitaría que tú también fueras conciente de estas cosas que hay que transmitir. No de forma literal como ya te lo conversé una vez, sino a través de atmósferas, colores, lugares, gestos, movimientos.
Ahora lo estoy entendiendo, el idioma de la filmación, como la película en blanco y negro sobre las personas que vivían en una pequeña isla y cargaban agua. Claro que en nuestra grabación me gustaría hacer muchas alegorías a otras películas, con música y escenas parecidas.
Sabes que, me emocionó leerte. En la última carta, pude sentir, el tiempo en tus venas, el paso de la edad, la mirada hacia el horizonte que comprende más de bosques espesos y lluvia sobre la ropa. Así es, yo era así desde antes de conocerte y estuve viviendo lo que estás viviendo ahora hace mucho tiempo cuando era recién un niño en edad de pubertad, cuando salía a correr en la noche con el corazón encendido y volvía a mi casa muy tarde para encerrarme en mi pieza a dibujar con lápices de cera y mirarme al espejo para tratar de enterme. La soledad que me acompaña hoy es mi amante más preciado.
Antes de ti y los demás está mi preciada soledad.
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